Aunque el proyecto de las licencias Creative Commons comenzó a andar en 2001 sus creadores, Lawrence Lessig, Hal Abelson y Eric Eldred, han decidido celebrar su décimo cumpleaños el próximo 16 de diciembre.
Tal día como ese en 2002 se publicaron las primeras versiones de estas licencias que tienen como objetivo principal dotar a los autores de una herramienta que les permita decidir la manera en la que su obra va a circular por Internet que se aleje de la de «todos los derechos reservados» y que se adapte a la nueva realidad que supone vivir en un mundo en el que la tecnología permite hacer copias digitales de casi cualquier obra, y todo ello sin necesidad de dejar su obra en el dominio público.
Así, las seis licencias Creative Commons van desde la más abierta, bautizada como Reconocimiento (CC BY), que permite hacer cualquier uso de una obra como redistribuirla, remezclarla, retocarla, o crear otras obras a partir de ella, siempre que se de crédito al autor original de esta, a la conocida como Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada (CC BY-NC-ND), que permite descargar las obras publicadas con esta licencia y compartirlas con otros, pero sin cambiarlas en absoluto, y citando siempre al autor original.
Las licencias CC están diseñadas además en tres capas, que incluyen el lenguaje legal tradicional, una explicación legible por humanos, y un código legible por las máquinas, algo fundamental hoy en día para que los motores de búsqueda y otros servicios de Internet puedan incluirlas en las categorías correspondientes.
Críticas
Están disponibles además en varios idiomas, adaptadas a las legislaciones de los distintos países en los que se van publicando, aunque su validez legal es fruto de discusiones entre los profesionales del sector.
De hecho, algunos de estos profesionales aducen que las leyes del copyright existentes ya son suficientes, y que aún en el caso de no serlo las licencias CC están siendo una cortapisa para cualquier posible intento de reforma y armonización a nivel internacional de estas leyes; sus defensores, por contra, dicen que las licencias CC están basadas en el copyright tradicional y que de hecho lo complementan.
Populares en Internet
Para celebrar el décimo aniversario de las licencias desde Creative Commons están promoviendo una campaña que del 7 al 16 de diciembre anima a quienes ya usen y conozcan las licencias a realizar cualquier actividad o publicar alguna obra que contribuya a conmemorar este aniversario y a difundir la filosofía copyleft.
Pero lo cierto es que a diario se publican ya miles de obras bajo licencias CC en múltiples formatos, sean estas anotaciones en un blog, fotografías en Flickr –donde por ejemplo hay ya más de 250 millones de imágenes con licencia CC, vídeos en YouTube y Vimeo, etc.
Es una prueba de que en estos 10 años millones de autores han decidido usarlas, aunque sólo sea como forma de dejar clara su posición al respecto y de apoyar la cultura de la remezcla y de compartir que Internet está creando y fortaleciendo, algo de lo que todos saldremos ganando.
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