¿Puede confiarse en la "independencia" de los organismos que, oficialmente, se encargan de velar por nuestra salud? Las diferentes formas de control que las multinacionales ejercen sobre estas instituciones son escasamente publicitadas por los grandes medios de comunicación, supeditados también a los mismos poderes.
La interesada desinformación sobre un asunto de tanta importancia, en cualquier caso, no ha impedido que episodios como los de la epidemia de gripe aviar, en los que las decisiones de la Organización Mundial de la Salud favorecieron de manera sustancial a las grandes farmacéuticas encargadas de fabricar las vacunas, comenzaran a suscitar serias dudas entre un número creciente de ciudadanos.
En España, sin embargo, el Gobierno del Partido Popular parece empeñado en “facilitar” que la población habrá definitivamente los ojos, mostrando sin ningún tipo de recato quiénes son los verdaderos dueños del Estado. El pasado mes de marzo, el consejo de ministros del Gabinete Rajoy nombraba presidenta de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN) a Ángela López de Sá y Fernández, alta ejecutiva de Coca Cola y mujer de confianza del presidente de la multinacional en España Marcos de Quinto. Antes de hacer efectivo este nombramiento, el Gobierno había unificado AESAN y el Instituto Nacional de Consumo (INC), dejando este último también, en la práctica, bajo las órdenes de la ejecutiva de la transnacional estadounidense.
El nombramiento de Ángela López ha provocado la respuesta inmediata, e ignorada por el Gobierno español, de las asociaciones por las seguridad alimentaria. "Es una decisión descarada por parte del PP poner como responsable de la AESAN a una representante de una bebida que ha provocado numerosas intoxicaciones y que tiene componentes perjudiciales para la salud e incluso venenosos como el Aspartamo" – denuncian.
Y la reacción de estas asociaciones no es en absoluto exagerada, a tenor de las conocidas prácticas de la multinacional fabricante de refrescos. El Ejecutivo del PP ha otorgado las riendas del organismo encargado de velar por la nutrición y de regular la comercialización de los productos en el territorio español a una empresa de amplio historial delictivo. Coca Cola ha sido denunciada, entre otras cosas, por super explotar y contaminar los acuíferos en zonas pobres de la India y América Latina, por provocar los desplazamientos forzados de población indígena y por su implicación en el asesinato de sindicalistas latinoamericanos, perpetrados por grupos paramilitares.
Pero no solo las asociaciones de defensa de la seguridad alimentaria han puesto el grito en el cielo por el nombramiento de la ejecutiva de Coca Cola Ángela López. También los fabricantes nacionales de productos vinculados a la dieta sana y mediterránea han expresado su desacuerdo con la designación. "El sector está en alerta máxima por este nombramiento, por la bajada de estándares en el binomio alimentación-salud, y el posible trato de favor a Coca-Cola", apuntó un alto ejecutivo que prefirió mantener el anonimato.
La desconfianza del sector se ha incrementado aún más, después de que se conociera que la nueva responsable pública de la nutrición y salud alimentaria de los españoles ha pedido la excedencia a Coca-Cola, para no perder la relación y los intereses derivados de su trabajo en la empresa. La propia página web de AESAN, reconoce en la escueta nota sobre el "fichaje" del gobierno, que "en la actualidad", Ángela López "trabajaba como directora de Asuntos Científicos y Normativos de Coca-Cola Iberia".
de 20minutos.es
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