Así lo sigue pensando el semanario británico The Economist, que desde hace un lustro, alerta de la sobrevaloración de los precios en nuestro país. La publicación asegura que los pisos en España siguen inflados entre un 8% y un 18%. Casi un 10% en función de los ingresos netos de los ciudadanos, y casi un 20% si se tiene en cuenta la relación entre el importe de venta de los inmuebles y el precio de los alquileres. Una sobrevaloración a pesar de que la publicación fija en un 31,3% la caída desde los máximos registrados en el cuarto trimestre de 2007.
de Forges
The Economist creó en 2010 un índice que se basaba, precisamente, en la relación entre el importe de venta de los inmuebles y los alquileres y los ingresos netos de los ciudadanos de diferentes países para calcular los precios razonables de la vivienda. Entonces, hace cinco años, la vivienda en España seguía sobrevalorada más de un 50% y desde entonces, la publicación siempre ha considerado que en España, los precios de las casas deben ajustarse aún más.
Dicho esto, el de nuestro país no es un caso único. No en vano, en estados como Canadá (entre un 35% y un 89%), Francia (25%-29%), Bélgica (50%-55%) o Australia (39%-61%), las viviendas están mucho más sobrevaloradas en relación con los ingresos medios con que cuentan sus ciudadanos.
Los datos de The Economist reflejan, sin embargo, que de realizarse el ajuste, este será con cuentagotas, ya que en el último año los precios apenas han caído un 0,2%, el descenso más suave de todos los países analizados, por debajo de los registrados en Grecia (-6,1%), China (-5,6%), Singapur (-3,9%), Italia (-3,8%) o Francia (-2,1%).
Por el contrario, Irlanda, un país con una burbuja inmobiliaria muy similar a la vivida en España y donde los precios se ajustaron casi un 40% desde máximos, encabeza los incrementos de precios con un 16,2% interanual, seguido de Turquía (16%) y Hong Kong (11,9%).
No hay comentarios:
Publicar un comentario