Mikel Arana, director general de Ordenación del Juego del Ministerio de Consumo, ha anunciado que su departamento ha identificado hasta cuatro tipos distintos de loot boxes o cajas de botín en los videojuegos, y que solo uno de ellos estaría sujeto a la ley del juego que este departamento reformará el año que viene.
Lo ha hecho en el marco de las II Jornadas de Defensa de los Derechos Digitales en los Videojuegos que organiza la asociación cultural Ars Games y que patrocina el Ajuntament de Barcelona y la Generalitat de Cataluña, y en reemplazo a la conferencia inicialmente prevista del propio ministro de Consumo, Alberto Garzón.
Las loot boxes o mecanismos de recompensas aleatorias, según define el propio Ministerio de Consumo, es un fenómeno en boga en la industria del videojuego. Comprando una suerte de participación, los usuarios pueden adquirir mejoras estéticas o jugables en títulos como el FIFA 22. Expertos alarman de que pueden incentivar cuadros de ludopatía.
De ahí que el Ministerio de Consumo que dirige Garzón lleve meses abordando su futura regulación.
En su intervención, Arana ha explicado qué se considera juego de azar según la vigente Ley 13/2011 de regulación del juego. "Que haya que pagar por participar, que haya un elemento de azar en la determinación de su resultado, que el premio transferido al ganador sea convertible en moneda real", ha enumerado.
"Esto significa que en la actualidad aquellas cajas de botín que ya cuentan con esas tres características son consideradas juegos de azar, y por lo tanto, al carecer de una reglamentación específica, están prohibidas", como estipula el artículo 5 de la ley vigente.
Por ello, el que los premios de las cajas botín en videojuegos sean convertibles a moneda real suscita, según concluye el propio Departamento de Ordenación del Juego, que existan diferencias entre muchos de estos "mecanismos de recompensa aleatorios" que aparecen en los videojuegos. Sin embargo, hay loot boxes que no cumplen todas esas características.
La Dirección General de Ordenación del Juego ha identificado cuatro tipos distintos de loot boxes presentes en los videojuegos hoy día.
Uno, que cueste dinero real y los premios tengan valor económico. Dos, que cuesten dinero real y los premios no tengan valor económico. Tres, no cueste dinero participar y el premio sí tenga valor económico. Y cuatro, que no cueste dinero participar y que el premio tampoco tenga ese valor económico.
Con la ley vigente, solo el primero de estos tipos estaría sujeto a la ley de juego y al carecer de regulación estaría prohibido. Pero según ha explicado Arana, "una cosa es que hayamos definido qué mecanismos encajan en la definición de la ley y otra cosa es que demos el tema por zanjado".
"La cuestión es que aunque los premios obtenidos no se puedan monetizar, la mecánica [de estas loot boxes] comparten ciertas dinámicas y semejanzas con las máquinas de azar". Desde su diseño para incentivar mecanismos de recompensa y de refuerzo de la conducta hasta la capacidad de ofrecer pérdidas disfrazadas de ganancias.
"Por ello, a principios de año decidimos abrir un proceso de participación ciudadana. Recibimos hasta 19 aportaciones con propuestas que iban desde mantener el status quo favoreciendo la autorregulación con los códigos PEGI hasta quienes abogaban por la prohibición", ha detallado el alto cargo de Consumo.
Los códigos PEGI son los códigos europeos que marcan las edades recomendadas mínimas para poder acceder a distintos videojuegos.
Aunque "todavía es pronto para anticipar los detalles de las fórmulas elegidas", dado que son "muchos los sectores en los que aplicar esta normativa" lo más "prudente" será, para Arana, "abrir procesos de diálogo una vez tengamos el borrador". Un borrador que se espera que se presente en las próximas semanas.
"Lo que sí puedo decir es que no regularemos de la misma manera los cuatro tipos de cajas de botín y que la regulación no será la misma para menores y mayores de edad". La reforma de la ley del juego está prevista que entre en vigor el año que viene y además del Ministerio de Consumo, tendrán que intervenir en las loot boxes el Ministerio de Cultura y el Ministerio de Industria.
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