18 dic 2023

Gobierno de Cataluña atenta contra la salud infantil: pediatras desplazados por recortes

El Gobierno de Cataluña, en una medida que ha despertado una ola de críticas y protestas, ha anunciado un plan que significará una drástica reducción de la presencia de pediatras en el 80% de los centros de salud de atención primaria a partir del próximo año. Esta decisión, impulsada por el consejero de Salud, Manel Balcells, de ERC, ha sido calificada por muchos como un ataque directo a los derechos fundamentales de los niños y niñas de Cataluña y un claro reflejo de políticas de austeridad que ponen en riesgo la salud pública.

Bajo este nuevo modelo, los servicios pediátricos serán reemplazados en gran medida por la telemedicina y centros concentrados de pediatría, ubicados teóricamente a no más de 30 minutos en coche. Esta medida, percibida como una solución de bajo costo a los desafíos del sistema de salud, ignora las realidades de las familias sin fácil acceso a transporte o aquellas que viven en áreas rurales o desfavorecidas, exacerbando las desigualdades existentes en el acceso a la atención médica.

El consejero Balcells, designado tras la salida de "Junts per Catalunya" del Govern, defiende este plan como una respuesta a la falta de especialistas y la necesidad de modernizar el sistema. Sin embargo, este argumento ha sido fuertemente cuestionado por profesionales de la salud, sindicatos y movimientos sociales, quienes ven en estas acciones una privatización encubierta de la salud y una peligrosa precarización de los servicios esenciales.

Las reacciones no se han hecho esperar: sindicatos de enfermeras, ya en huelga por condiciones laborales precarias, han intensificado sus demandas, mientras que movimientos sociales y políticos se han unido en un frente común para rechazar este modelo y demandar una atención pediátrica de calidad y cercana a todos los ciudadanos. En paralelo, se ha convocado a movilizaciones y acciones de protesta, evidenciando un creciente descontento popular ante lo que se considera una regresión en los derechos de atención a la salud infantil.


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