Avisaron de que se movilizarían en caso de una sentencia contraria a los clientes; y lo han confirmado nada más conocer la decisión del Tribunal Supremo. Los líderes de Unidos Podemos han tardado pocos minutos en reaccionar a la marcha atrás del alto tribunal, que ahora vuelve al punto de partida y considera que son los clientes de la banca los que deben cargar con el impuesto de actos jurídicos documentados, en lugar de la entidad que les concedió la hipoteca. “Gana la banca y pierden los ciudadanos”, tuiteó el líder del partido, Pablo Iglesias. Dirigentes socialistas y populares también han criticado la muy polémica sentencia del Supremo.
Iglesias disparó por elevación. El líder de Podemos considera no solo que la sentencia pone “en entredicho” la independencia del Supremo, sino que debilita la democracia. “La vergüenza y la rabia deben convertirse en una gran movilización cívica para defender los derechos de la mayoría frente a los privilegios de una minoría”, escribió Iglesias. “Queda comprometida la seguridad jurídica, y saldremos a la calle a defender que se haga justicia”, añadió Irene Montero, portavoz parlamentaria del partido.
Su aliado y coordinador federal de IU, Alberto Garzón, escribió cuatro tuits en pocos minutos en los que dejaba clara su indignación. "Los bancos privados son unos ladrones, el principal enemigo de las democracias y los responsables de saquear nuestras economías. La mayoría del Tribunal Supremo se sitúa de su lado, ratificando que la justicia tiene un precio y que el sistema está podrido y agotado", escribió en uno. Garzón e Iglesias han convocado una concentración de protesta el sábado a las 18 horas frente al Tribunal Supremo.
No solo los representantes del partido morado atacan al Supremo. Dirigentes socialistas y populares también han criticado la sentencia. A última hora de la tarde del martes, una frase parecía omnipresente en los perfiles de Twitter de políticos, periodistas y ciudadanos anónimos: "La banca siempre gana”.
“Pierde la Justicia y se retrata el TSJ. Nos ahorramos mañana las amenazas de los banqueros. Pero esto no debe acabar así”, escribió en esta red social el diputado socialista y exalcalde San Sebastián Odón Elorza. El presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, tildó la decisión judicial de “grave error de consecuencias sociales imprevisibles”.
El Gobierno, por su parte, ha preferido no opinar sobre la muy polémica decisión. La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, se limitó a pedir respeto para las resoluciones judiciales nada más conocer la sentencia. Fuentes del Ejecutivo han asegurado a la agencia Europa Press que ahora van a analizar el impacto de la sentencia del Supremo. Estas fuentes han asegurado que fijarán una posición en el Consejo de Ministros que se celebrará el jueves.
Iglesias disparó por elevación. El líder de Podemos considera no solo que la sentencia pone “en entredicho” la independencia del Supremo, sino que debilita la democracia. “La vergüenza y la rabia deben convertirse en una gran movilización cívica para defender los derechos de la mayoría frente a los privilegios de una minoría”, escribió Iglesias. “Queda comprometida la seguridad jurídica, y saldremos a la calle a defender que se haga justicia”, añadió Irene Montero, portavoz parlamentaria del partido.
Su aliado y coordinador federal de IU, Alberto Garzón, escribió cuatro tuits en pocos minutos en los que dejaba clara su indignación. "Los bancos privados son unos ladrones, el principal enemigo de las democracias y los responsables de saquear nuestras economías. La mayoría del Tribunal Supremo se sitúa de su lado, ratificando que la justicia tiene un precio y que el sistema está podrido y agotado", escribió en uno. Garzón e Iglesias han convocado una concentración de protesta el sábado a las 18 horas frente al Tribunal Supremo.
No solo los representantes del partido morado atacan al Supremo. Dirigentes socialistas y populares también han criticado la sentencia. A última hora de la tarde del martes, una frase parecía omnipresente en los perfiles de Twitter de políticos, periodistas y ciudadanos anónimos: "La banca siempre gana”.
“Pierde la Justicia y se retrata el TSJ. Nos ahorramos mañana las amenazas de los banqueros. Pero esto no debe acabar así”, escribió en esta red social el diputado socialista y exalcalde San Sebastián Odón Elorza. El presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, tildó la decisión judicial de “grave error de consecuencias sociales imprevisibles”.
El Gobierno, por su parte, ha preferido no opinar sobre la muy polémica decisión. La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, se limitó a pedir respeto para las resoluciones judiciales nada más conocer la sentencia. Fuentes del Ejecutivo han asegurado a la agencia Europa Press que ahora van a analizar el impacto de la sentencia del Supremo. Estas fuentes han asegurado que fijarán una posición en el Consejo de Ministros que se celebrará el jueves.
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