El veterano político catalán Xavier Trias, miembro destacado del partido conservador nacionalista Junts, ha recibido un cálido recibimiento en el pleno de investidura de la alcaldía de Barcelona, donde los asistentes coreaban "alcalde" a su llegada. No obstante, el esperado discurso que había preparado para su investidura quedó relegado, dejando lugar a palabras de rechazo y desafío: "Yo, a mis 76 años les puedo decir, tranquilamente, que les zurzan a todos".
Tras unas intensas y decisivas horas, Trias se quedó a las puertas de la alcaldía de Barcelona, una posición que esperaba recuperar tras haber sido desplazado por Ada Colau en 2015. En un vuelco de última hora, los comuns eligieron votar por Collboni, relegando a Trias a la oposición.
Trias no se ha quedado callado ante la operación política que ha dado lugar a este resultado. "La operación que se ha dado hoy no es casualidad. Es la tercera vez que pasa", ha declarado. Primero, ha argumentado, "se intentó destruirme desde el Gobierno central", refiriéndose a las acusaciones de corrupción que se dirigieron contra él (y que no fueron las únicas).
Trias ha señalado con dureza tanto a Colau como a Collboni por su participación en los últimos eventos. Sobre los últimos comicios, en los que resultó vencedor Maragall, ha señalado que "unas fuerzas" le impidieron ser alcalde. Según Trias, "Fue un invento, no de Colau, sino de Collboni" (del PSC), a quienes acusa de crear un "mal ambiente y enfrentamiento", y cuyo gobierno conjunto, dice, "se ha basado en mentiras."
Finalmente, Trias lanzó una mirada al futuro: "El tiempo nos pondrá a todos en nuestro lugar". En su caso, esto podría significar un retiro de la política municipal. "A mí me pondrá en mi casa", ha admitido, dejando entrever la posibilidad de abandonar su cargo de concejal tras no haber conseguido llegar a la alcaldía.
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