Servir, proteger... y vigilar. Esa fue la tarea de los escoltas con los que contó Felipe Juan Froilán desde que trascendió la pelea en la que se vio envuelto en una discoteca de Madrid en Navidad. Casa Real movilizó un coche y tres agentes que 'blindaron' al sobrino del Rey hasta su marcha a Abu Dabi. Una decisión, la de enviarle junto a su abuelo, en la que jugó un papel determinante el propio Juan Carlos I y que tiene un objetivo claro: evitar su declaración presencial si finalmente hay un juicio por la reyerta en la sala madrileña.
Así lo confirman a Vozpópuli fuentes próximas al equipo de escoltas de Casa Real, que explican que Froilán, cuarto en la línea de sucesión, dispuso, hasta su marcha a Emiratos Árabes el pasado fin de semana, desvelada por El Confidencial, de un equipo de seguridad propio, algo que no tenían antes de la pelea en la discoteca.
Tal y como se informó en este medio, hasta entonces el hijo de la infanta Elena contaba con con un equipo de contravigilancia, integrado por "dos personas", pendientes de su día a día. Además, si realizaba desplazamientos dentro de España confirmados al Ministerio del Interior, se podía recurrir también a ese servicio de contravigilancia que ofrecen grupos de escoltas provinciales de la Policía Nacional o de la Guardia Civil.
Esa situación, sin embargo, cambió después de Navidad. Una vez conocida la reyerta en la discoteca de la calle Goya de Madrid, Casa Real tomó dos decisiones: "Ponerle escolta para tenerle vigilado... hasta su marcha a Abu Dabi".
Objetivo: evitar más polémicas...
La postura de Zarzuela, explican personas bien informadas de la Casa, fue firme desde que se difundió la nueva controversia del sobrino de Felipe VI: "No era ni la primera ni la segunda y la difusión de esta pelea estaba haciendo daño a la imagen de la institución. Había que tomar medidas, y se tomaron".
El objetivo principal, explican las fuentes consultadas, era evitar más polémicas protagonizadas por un Froilán que estaba convirtiéndose en motivo de preocupación para Casa Real. Fue entonces cuando se le impuso ese equipo de tres escoltas y un coche y comenzó la "negociación" para que aceptara su marcha a Abu Dabi.
Según explican a este medio desde el entorno de Zarzuela, la primera reacción del hijo de Elena fue negarse al mismo 'exilio' que su abuelo. No obstante, fue precisamente la intervención de Juan Carlos I la que resultó decisiva para hacerle cambiar de opinión.
Ahora, el objetivo fundamental es buscarle una ocupación y una residencia fija: "De primeras, contará con el 'cobijo' de su abuelo, hasta que decida si se pone a trabajar o a estudiar". El destino definitivo de Froilán, en todo caso, no está fijado: "Puede ser en cualquier zona del Golfo Pérsico".
Juan Carlos I, destacan estos informantes, cuenta con una "potente agenda de contactos" en la zona, por lo que su nieto encontrará "muchas facilidades". El Emérito, además, está "contento" de tener a su nieto cerca y poder ayudarle. De esta forma, explican estas fuentes, Zarzuela ha logrado un win-win: "Alejar a Froilán de España y tener al padre del Rey entretenido en Abu Dabi".
... y una declaración presencial
El otro gran objetivo del 'exilio' de Felipe Juan Froilán, añaden las fuentes consultadas, es evitarle una declaración presencial como testigo en un previsible juicio con motivo de la reyerta en la que estuvo implicado.
Así, personas vinculadas a la seguridad de Zarzuela recuerdan que más de 30 personas se vieron envueltas en la pelea, la Policía Nacional abrió diligencias y hubo incluso intervenciones hospitalarias. Sin ir más lejos, la del propio amigo de Froilán, que fue al hospital con una herida de arma blanca de 2,5 centímetros.
Las mismas fuentes destacan que Froilán, como él mismo afirmó en el comunicado que hizo público a finales del año pasado, "es testigo de un presunto delito de lesiones con arma blanca" y, por tanto, podría ser llamado a declarar, en esa calidad de testigo, en un juicio.
Ese juicio, añaden, podría celebrarse incluso si ninguno de los 30 implicados presentara denuncia: "Existiendo un informe de la Policía Nacional, y una intervención hospitalaria, se puede poner en marcha de oficio".
Dicho escenario, de hecho, también ha sido determinante en la decisión de 'sacar' a Froilán de España: "Si finalmente se celebra juicio y él está fuera, puede declarar por videoconferencia, pero Casa Real se ahorra la imagen del sobrino del Rey entrando en el juzgado a declarar por haber estado presente en una pelea con navajazos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario